Algunas reflexiones (...)

Después de todo, tuve que aceptarlo: en la vida a veces se gana, y a veces se empata. No hay más vuelta que darle. Hay un tiempo para cada cosa: Un tiempo para hablar, otro para callar; un tiempo para trabajar, otro para descansar. Ya lo dice la Biblia.
Y así, mis queridos hermanos, como hay un tiempo para ganar, hay otro para empatar. La vida siempre está poniéndonos a prueba y debemos estar preparados para cualquier cosa.
Más que nada, entender que la vida se trata de no saber de qué se trata…puede venir cualquier cosa, y todo lo que hacemos nosotros por nuestro destino debe ser, cuando mucho, un 24,96% de las posibilidades. Comparen eso con el resto, un 75,04%.